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Rivas Ciudad Deporte 3-0 Bera Bera
(25-22/25-18/25-20)
Porrot berria beste partidu txar batean, eta talde Donostiarraren momentu txarra handiagotzen da.
La dificultad para encontrar ritmo que está marcando este inicio de temporada se agrava más aún en los partidos lejos de Donostia. A pesar de que Rivas ostentaba la última posición, no dejaba de ser engañosa. Las dificultades de los madrileños para llevar a cabo una pretemporada de garantías y la llegada de nuevas piezas aún por encajar estaban detrás de una posición que más que seguramente dejen atrás en las próximas jornadas.
En cuanto al partido, los azules volvieron a entrar fríos al partido. Si bien es cierto que contaban con las importantes bajas de sus dos receptores titulares, Aitor Lizarazu y Luka Rejc, la realidad es que faltó algo más en el juego donostiarra y no fueron las piezas de repuesto sino los jugadores más habituales los que no supieron sacar el partido adelante. Con un nivel de recepción correcto, los gipuzkoanos se mostraban poco acertados en ataque y débiles en bloqueo, ante un Rivas que jugaba cómodo y ordenado en el campo, dando siempre una sensación de seguridad. El 25-22 final hizo justicia a lo visto en el campo.
Si mal terminó el primer set, peor empezó el segundo. Los azules reincidían en los errores no forzados, lo que les volvió a llevar a tener que perseguir en el marcador. Curiosamente, no era sino Diego Correa, habitual colocador del equipo y receptor de emergencia ante las bajas de Luka y Aitor el que se echó el equipo a la espalda e intentó liderar a sus compañeros, con escaso éxito ya que Bera Bera se seguía mostrando apático. A rachas y con juego intermitente, seguían dejando jugar cómodo a su rival, y en este deporte cuando un equipo juega cómodo tiene vía libre para crear combinaciones y Rivas lo aprovechó. El 25-18 volvió a ser el termómetro del juego de ambos equipos.
El partido estaba muy cuesta arriba pero aún se podía salvar. Por ello, Bera Bera entró ligeramente más entonado al campo. Sin que el juego llegase a fluir, sí que comenzaron a mostrarse como un equipo más compacto y a ajustar en bloqueo y defensa. Sin embargo, volvía a tener fallos propios que penalizaban en el marcador pero sobre todo en la cabeza. Así, Rivas volvió a distanciarse en la fase final del set para llevarse con total merecimiento el partido.
Cuesta encontrar aspectos positivos en un encuentro como el de ayer, por lo que quizá lo mejor sea repasar el partido, que para eso se graba, y tratar de diagnosticar donde estuvieron los fallos y como solucionarlos. A pesar del mal momento que es mas que obvio, todavía queda tiempo de sobra de remontar posiciones en la clasificación, aunque ello pase por recuperar sensaciones y volver a la dinámica positiva. El próximo sábado 1 de diciembre a las 19:00 recibiremos la visita en Pío Baroja del Sporting Bar Teruel VB Soria. Que sea la primera piedra de un nuevo camino. Por lo hoy dejamos, feliz semana, y como siempre, Gora Bera Bera!
