Terceras
Bera Bera ocupa actualmente la tercera posición en la liga ABF, tras el invicto Itxako y el Mar Sagunto al que derrotó a domicilio 21-25 en la última jornada. Con los mismos puntos que las donostiarras se encuentra el BM Alcobendas, el rival del sábado. Junto con el Mar Alicante, son los equipos que se disputarán la segunda plaza dado que Itxako parece inalcanzable. Para ello, Bera Bera tiene a su favor Bidebieta por donde pasarán madrileñas y valencianas, además de navarras.
Seis victorias
Balonmano Bera Bera ha hecho pleno en casa (Kukullaga, Mar Alicante, Porriño y Castro Urdiales), empató en León, venció en Gijón y Sagunto y perdió ante Itxako y Elche. Tras el partido ante Alcobendas, antes de que finalice la primera vuelta, visitará al Rocasa canario, recibirá al Elda Prestigio el 18 de enero y viajará a Murcia el día de San Sebastián para jugar el 21 de enero, de modo que antes de que expire este mes disputará cinco jornadas de liga.
262 goles
En nueve partidos ha perforado la portería rival en 262 ocasiones, lo que da una media superior a 29 goles, el tercer equipo más goleador, tras Itxako y Mar Sagunto. A las donostiarras se les da mejor los segundos tiempos, donde han conseguido 24 goles más que en los primeros 30 minutos. La medallista de bronce en el Mundial, Eli Pinedo, es la máxima realizadora del equipo con 43 goles, es decir, una media de 4,77 goles por partido. Tras ella aparecen Bea Fernández (36), Eider Rubio (35) y la lesionada Anna Punko (33). A continuación, surgen Berta (27), Carvalho (25), Ziarsolo (24) y Cuña (22).
21 penaltis convertidos
De 27 lanzados, lo que da más del 77 % de acierto. Normalmente es tarea de Eider Rubio, aunque también acuden a los siete metros Verónica Cuña y Bea Fernández. Todavía está en el recuerdo el penalti fallado por Eider ante el Itxako a falta de cinco segundos para el final lo que hubiera servido para empatar el partido. El gol posterior de la central donostiarra tras recoger el rebote no subió al marcador por ser fuera de tiempo.
Por el contrario, la portería del Bera Bera evita el gol en tres de cada diez lanzamientos de siete metros. Destaca el dato que en estos nueve partidos le hayan pitado once penaltis más en contra.
190 goles encajados
Bera Bera es el equipo menos goleado de la categoría, con 21,1 goles por partido de media en su debe. En este sentido, se cumple una de las premisas de la entrenadora del Balonmano Bera Bera, Reyes Carrere. “Si encajamos menos de 24 goles, ganamos seguro”. Por parciales, el equipo ha recibido solamente cuatro goles más en la segunda mitad que en la primera. El reto actual es conseguir convertir las recuperaciones en defensa en un contraataque que finalice en lanzamiento.
Si encaja menos de 24 goles, ‘no problem’
Y así ha ocurrido en las seis victorias de liga. Y al contrario, ha sufrido. Si Bera Bera recibe más de 24 goles ha perdido en Lizarreria y Elche y ha empatado en León (26). En dichos partidos, las donostiarras han encajado 14 goles o más en un tiempo. Además, ha perdido tres parciales al descanso y ha empatado uno, los cinco restantes han sido favorables. A destacar que ha ganado todos los parciales en las segundas partes, exceptuando el del Itxako (14-12). Otra vez esos 14 goles en contra…
Los parciales de los partidos indican que a las jugadoras del Bera Bera les cuesta entrar en el partido puesto que excepto en el debut liguero ante Kukullaga (4-1), en el resto el marcador está ajustado. Otro dato a destacar es que en los últimos cinco minutos no se invierte el resultado de ese momento.
43 exclusiones
Lo que da una medida de casi cinco por partido. Destacan, entre ellas, dos rojas directas, especialmente dura fue la de Eli Pinedo en León porque fue al protestar y posibilitó el empate local y la de Dara Carvalho en Elche al ser en el último minuto lo que le imposibilitó jugar en Sagunto por caprichos del calendario. Con nueve, ambas internacionales son precisamente las jugadoras del Bera Bera que más exclusiones sufren en liga.
15 jugadoras
Han sido utilizadas por la entrenadora Reyes Carrere. Destaca la recuperación de Alba Menéndez que volvió a la pista ante el Castro Urdiales y la presencia en la convocatoria de la pivote juvenil Olatz Ramón ante el León, a causa de la ausencia de Carvalho y Mena que disputaban los Juegos Panamericanos.
El reto actual radica en suplir la baja de Anna Punko, cuya participación en la eliminatoria de la Copa EHF es más que dudosa. Teniendo en cuenta ambos partidos europeos (5 de febrero en Rusia y el 11, en el Gasca), las jugadoras del Balonmano Bera Bera disputarán en poco más de un mes ocho encuentros que confirmarán sus retos para la presente esta temporada.
Uno de los aspectos claves de la competición es la preparación física, sobre todo para afrontar un calendario con un parón de casi dos meses y, a partir de ahora, cinco meses de partidos sin descanso.
Quien cubre esa tarea es Iker Ferández que cumple su segunda temporada como preparador físico del equipo de división de honor del Balonmano Bera Bera. Es quien define todo lo relacionado con aspectos clave como la resistencia, fuerza y potencia, velocidad y prevención de las jugadoras para que desempeñen su actividad lo mejor posible durante toda la temporada. En esta campaña ha tenido que prever esta situación de parón de dos meses y una sobrecarga de partidos a partir de este sábado, 7 de enero, que es cuando se reanudará la competición.
Para ello su metodología consiste en dibujar un perfil de cada integrante de la plantilla en diversos parámetros. En un primer diagnóstico, trata de detectar asimetrías en la fuerza tanto del tren superior como en el inferior, en otros términos, si las diferencias entre los miembros derecha e izquierda supera el 15% o 20% “hay que trabajar esa zona con mayor intensidad y tratar de buscar el equilibrio”. La elaboración de ese perfil de la jugadora “facilita a su vez establecer unas probabilidades de sufrir alguna lesión y trabajar en la prevención”.
Las jugadoras se someten a una serie de chequeos para el tipo de trabajo que han de realizar. Así, por ejemplo, se realizan mediciones de la potencia de las jugadoras con pesas “para fijar con qué cargas han de trabajar individualmente, de cara a optimizar la velocidad a los parámetros de fuerza”.
“De lo que se trata es de individualizar lo máximo y que cada jugadora se entrene según sus necesidades” explica Iker Fernández. Para ello, se establecen tres mediciones de diversos parámetros, en pretemporada, antes del parón y al final. La primera sirve para ver su estado, cómo están y a partir de ahí se prepara el trabajo de todo el año.
A partir de ahí, durante la temporada definimos una batería de pruebas que las reiteramos a lo largo de todos los meses que dura la competición”.
Iker se muestra “muy contento hasta el momento” del estado físico de las jugadoras. Durante este año y cuatro meses de trabajo en el Balonmano Bera Bera “se ha visto una evolución clara, por ejemplo, un 20% más en potencia. Hace un año alcanzaban los 500 vatios y hoy están por encima de los 700 vatios”.
El preparador físico reitera su premisa: “constancia con el método, planificación y control”. Su objetivo es igual de claro que de complicado: “alcanzar el nivel óptimo físico, siempre”, a pesar de las trampas del calendario de competición al que están sometidas las jugadoras.
“Durante este periodo de parón, hemos aprovechado para amoldar, para aumentar la sobrecarga del entrenamiento de la fuerza y potencia sobre otros aspectos” explica. “Durante la competición, tratamos de mantener con dos sesiones a la semana y para las vacaciones les hemos dado pautas para un mantenimiento físico y un trabajo individualizado”.
Prevención
Otra de las áreas de trabajo que trata de mimar Iker Fernández es la prevención. “En balonmano la mayor frecuencia de lesiones se produce sobre todo en el tren inferior" explica. "Para ello, -continúa- hemos diseñado una batería de test y ejercicios con los que conseguimos que se gestionen mejor las fuerzas a las que son sometidas las piernas en una caída, es decir, saber caer y saber frenar”.
La batería de test y ejercicios consta de diversos saltos de vallas, saltos en caída, multisaltos horizontales y verticales ejecutados con las 2 o 1 pierna para fortalecer la estabilidad de la rodilla. En definitiva, “se trata de que en prevención se defina también el trabajo de forma individualizada y se trabaje más sobre el miembro más débil” apunta.
Además, estos ejercicios se combinan en la misma sesión con circuitos de velocidad y agilidad para mejorar la rapidez de los desplazamientos en balonmano
Durante estos 16 meses, Iker que gestiona la preparación física a otros deportistas, además de un blog sobre la temática, se encuentra “satisfecho” del trabajo realizado en el Balonmano Bera Bera, “en especial por la mejora que han experimentado las jugadoras y por la casi ausencia de lesiones”.
Se trata de apoyar al colectivo Aitzina en su programa ‘Reciclaje solidario” cuyo reto es financiar un proyecto de investigación de la enfermedad Ataxia-Telangiectasia, que afecta sobre todo a niños y niñas en sus dos primeros años de vida. Sus efectos están asociados a la carencia de coordinación en los movimientos musculares, en especial en el andar y en el habla, además de sufrir infecciones frecuentes de todo tipo que componen una enfermedad degenerativa.
Al ser una enfermedad ‘rara’ y se han detectado pocos casos –ocho en España y uno en Euskadi-, la investigación es cara. Según su página web de aitzina la asociación se plantea conseguir “la financiación mínima para iniciar un proyecto de investigación de la enfermedad, para lo que necesitamos una cantidad que oscila entre los 50.000€ y los 60.000 euros”.
Y eso significa nada más y nada menos que 3.000 toneladas de tapones para una campaña que comenzó en abril y finalizará en verano de 2012. En Gipuzkoa son puntos de recogida: centro comercial Urbil, la cervecería The Nest en Tolosa (calle Rondilla) y la Facultad de Informática de la UPV/EHU. Los tapones de esas botellas de agua están realizados con plástico no reciclado y por tanto tienen más valor en el mercado. Las jugadoras del Balonmano Bera Bera ya lo hacen; ahora toca al resto acordarse en guardar los tapones para apoyar dicha causa.